¿Qué leen los niños?
¿Las revistas infantiles y demás publicaciones periódicas para niños son de tan escasa trascendencia que no merecen la atención de los padres, o mas bien constituyen un serio problema para todos los que tratan de la educación de la infancia? ¿Esas lecturas refuerzan o contrarrestan la educación de la familia, de la escuela y de la catequesis? He aquí un problema digno de toda nuestra atención.
Si, los padres se han de enterar de las condiciones morales de los amigos de sus hijos, con mas razón han de saber que genero de personajes son esos amigos invisibles que llenan su imaginación y arrebatan su corazón, porque los TEBEOS seducen a los niños, se les meten por los ojos, les encantan con su artística portada en colores y les hacen soñar con las aventuras interminables de sus héroes.
¿CUANTO LEEN LOS NIÑOS?
Los niños leen muchísimas revistas y periódicos ilustrados de los que pocos son formativos, muchos son antieducativos, y algunos malos e irreligiosos. Cada día se multiplican mas en las ciudades las tienduchas en que se venden y cambian toda suerte de revistillas que explotan la curiosidad y candidez de los niños.
Llegan mensualmente a Bilbao unos 300.000 tebeos, que cuestan de cuatro a diez pesetas, con lo que gastan los niños mensualmente en prensa infantil mas del millón de pesetas. Al año leen esos niños 3.600.000 ejemplares (mas de 100.000 kilos de papel), en los que gastan varios millones de pesetas.
Estas cantidades bien encauzadas serian suficientes para crear en las grandes ciudades buenas Bibliotecas Circulantes de libros y revistas educativas para niños, que acabasen con toda la basura literaria que ahora deforma la generación del mañana. Bastaría lanzar el slogan: “Por diez pesetas al mes, tendrás libros de interés” para proporcionarles una lectura bonita, variada y educativa, costeada por sus padres.
Se publican en España por lo menos 70 títulos de revistas infantiles y cuadernos de aventuras que nunca acaban, con lo que el niño llevado de su innata curiosidad, vive en un mundo irreal y deformativo.
De una encuesta realizada en Madrid sobre 5.000 niños resulta que el 46 por 100 leen algún Tebeo todos los días, y el 34 por 100 los leen varias veces por semana. Apenas habrá niños en las ciudades que no lean a menudo la prensa infantil ilustrada.
En Italia hay 400 semanarios (TBO, Fumetti) para niños, con una tirada de 5 millones de ejemplares por semana.
De una encuesta hecha sobre 8.500 niños resulto que el 2 por 100 no leía ninguno, el 24 por 100 leía uno, el 9 por 100 leían cuatro, el 7 por 100 leían cinco, el 6 por ciento leían de diez a treinta Tebeos por semana.
Esta prensa infantil causa en los niños una honda impresión por la especial receptividad de la infancia y por tratarse de historietas ilustradas en colores.
Se vio que 1.460 leían revistas publicadas por la Acción Católica; 422, indiferentes, 242 leían temas frívolos y eróticos; 1.634, aventuras, y 100 revistas comunistas.
¿QUE LEEN LOS NIÑOS?
Actualmente en España no se permite publicar prensa corrosiva, pero la prensa comercial mas difundida es antieducadora; no triunfa la virtud, sino la astucia; no reina la justicia, sino la fuerza bruta, no enseñan a ser mejores, sino a vivir de trampas y picardías. ¿Y así vamos a reconstruir una España digna, justa y de elevados ideales?
“El 95 por 100 de lo que leen los niños y jóvenes españoles es antieducativo”.
ORIGEN DE LAS LECTURAS
Los niños leen primeramente lo que encuentran en casa, después lo que les presta gratis un amigo, luego lo que obtienen pagándolo a un compañero, sigue lo que alquilan en los kioskos por dinero o por cambio de revistas ya leídas y por fin lo que compran directamente.
De estas cinco fuentes de lecturas se deduce que los niños leen mucha prensa infantil al cabo de la semana, y casi siempre al margen de la vigilancia de sus padres y educadores. Esta falta de control es un grave fallo de la educación familiar y escolar que hay que corregir a tiempo.
IMPORTANCIA
La educación que se recibe en los primeros años es decisiva para toda la vida, y la lectura infantil, en la que el niño emplea muchas horas, no puede menos de modelarle en bien o en mal.
Lo que cuenta Cervantes de Don Quijote (Cap. I) nos pinta de mano maestra lo que sucede con los niños al entregarse a la lectura de los cuadernos de aventuras.
Comienzan a leer por matar el tiempo, pero luego les cobran tanta afición y gusto que olvidan sus deberes y estudios y gastan en ellos cuantos dineros pueden conseguir.
Bien pronto les ocurre lo que al caballero manchego, al que se le lleno “la fantasía de todo aquello que leía en los libros, así de encantamientos como de pendencias, batallas, desafíos, heridas, requiebros, amores, tormentas y disparates imposibles.”
Y se les asienta de tal modo en la imaginación ser verdad toda aquella maquina de soñadas invenciones, que para ellos no hay historia mas cierta en el mundo y al fin vienen a ejecutar y poner por obra todo lo que han leído en letras de molde y visto en los dibujos de sus idolatrados Tebeos, como Don Quijote se hizo caballero andante por imitar a los héroes de sus lecturas.
La prensa periódica imprime sus ideas en nuestros cerebros de un modo irresistible; cualquier arribista, sin ninguna formación, monta escuela en la que moldea miles de cerebros juveniles. Ningún poder iguala al de la Prensa en extensión, rapidez y eficacia.
Lo peor es que la mayor parte de esta Prensa no esta al servicio de la verdad ni del bien, sino que esta al servicio del oro; la prensa infantil es un negocio para ganar mucho dinero, sea como sea.
¿Es verdad que influye en la conducta lo que leen los niños en su prensa infantil? La respuesta nos la dan las estadísticas. Las lecturas inconvenientes han influido en el 40 por 100 de los niños delincuentes que pasaron por el Tribunal de Madrid en 1943.
Algunos de esos lectores llegaran a cometer los delitos que han leído y visto en los grabados, y otros muchos tendrán que sufrir una continua lucha en la vida para rechazar los impulsos de las pasiones agudizadas por esas lecturas.
Las revistas infantiles están llevando a nuestra niñez por el camino de la violencia y de la barbarie, incompatible con la dulzura que debe reinar en el corazón del niño. Son muy pocos los Tebeos que moralizan, tienden mas a revelar el mundo del crimen y del robo.
En prueba de esta real y malsana influencia convendrá aducir el siguiente caso. Fue descubierta en Bergamo (Italia) una banda de niños de 6 a 8 años que formaban la secta del “Mau-Mau” para romper cristales de ventanas, autobuses y tranvías. La policía, que estaba alarmada por los episodios de vandalismo que se sucedían en cadena, descubrió al jefe del Mau-Mau un niño de 8 años.
La detención tuvo lugar cuando el niño se dirigía a presidir una reunión secreta en una cueva cerca del río. Preguntado como le había venido la idea de fundar una secta de esta clase, respondió el niño mostrando un Tebeo en el que se daba con todo detalle la reconstrucción fidelísima y original de las hazañas de la secta infantil del Mau-Mau. (Surgam, 1954, 107)
No olviden este caso los padres y educadores que candorosamente creen que los Tebeos y cuadernos de aventuras son agua que resbala en un tejado de zinc sin dejar huella en el corazón ni en la conducta de los niños.
Es verdad que semejantes comportamientos antisociales no son obra de todos los días, pero se desencadenan de modo fatal cuando la lectura o el cine conmueven a un desequilibrado o al que se halla en un situación especial, entonces basta un pequeño fulminante para disparar un cañón.
PRENSA NOCIVA
Son positivamente dañosos los relatos detallados de crímenes y suicidios, cuentos de amor poco delicados, las historietas que exaltan al niño díscolo y desobediente o dejan malparados a los padres, maestros, sacerdotes y autoridades o ponen en ridículo la vida familiar.
Las que traen dibujos o descripciones sensuales, las novelas de trama amorosa con demasiadas efusiones, deslices y adulterios, las que exaltan el divorcio y el suicidio. Las novelas policíacas que excitan el odio y la venganza o hacen atractiva la persona del criminal, las que traen ilustraciones terroríficas indecorosas, las que describen con detalle los fraudes y robos.
Las que atacan a la religión o presentan a sus ministros en forma grotesca, las que exaltan el odio de clases y despiertan sentimientos de envidia, rencor y venganza, las que no recuerdan con moderación las glorias patrias.
DAÑOS DE LA PRENSA COMERCIAL
1) Deformación de los ojos por el mal papel, letras pequeñas, raras, delgadas e ilegibles que exigen una excesiva acomodación de la vista.
2) Deformación del lenguaje, que es bárbaro, lleno de extranjerismos y de frases de argot; no hay héroe que no se llame Jim o John. Faltas de sintaxis y de ortografía, lenguaje incorrecto e inculto.
3) Deformación del gusto artístico literario y pictórico por las rarezas y extravagancias continuas que prodigan; estamos padeciendo una grandisíma decadencia de arte que nos dejara para siempre estigmatizados en la Historia.
4) Deformación moral por la falta de sentimientos éticos y religiosos y predominio de la fuerza bruta y de la violencia. Todos son escenas de terror y de crimen, de luchas y muertes violentas, de tiros y cuchilladas, de robos y venganzas.
Las revistas para niños están llenas de pistolas, puñetazos, patadas, crueldades, palizas y asesinatos. Todos debemos contribuir a limpiar las calles de semejante basura infecta, nido de microbios antisociales, mil veces peores que los que causan la tisis o la lepra.
Con razón las naciones, aterradas por el aumento de la criminalidad juvenil. Comienzan a perseguir semejantes escuelas del crimen.
En Estados Unidos desean la promulgación de un código ético para revistas infantiles a fin de poner coto a la ola de criminalidad que ha invadido el país. En Inglaterra los vendedores de revistas por propia iniciativa han suprimido en muchas partes la venta de semejantes revistas. El ayuntamiento de Glasgow (Escocia) ha protestado contra la venta de historietas americanas ilustradas, llenas de casos horribles.
LEGISLACIÓN ESPAÑOLA
La principal es el Decreto de 24 de julio de 1955 y el reglamento de la misma fecha sobre publicaciones infantiles y juveniles que apareció el 2 de febrero de 1956. Se parece a la ley francesa del 19 de julio de 1949.
Estas y las anteriores disposiciones son resultados de las disposiciones de jueces, educadores y moralistas para que se levante un muro de contención contra la inmoralidad y antieducación de la prensa infantil y comercial.
Con ello ha desaparecido la edición y venta publica de la pornografía y lecturas que socavan los cimientos de la religión, de la patria y del orden social, pero los explotadores sin conciencia, atentos únicamente a ganar dinero, siguen editando una literatura infantil insulsa y sin valor educativo. La Ley impide la circulación de la prensa inmoral y truculenta, pero seguirá rodando la prensa, frívola y falta de todo valor formativo, que debe ser sustituida por otra prensa divertida y educativa.
Esta ley de prensa es magnifica pero hace falta urgir su cumplimiento.
PRENSA CATÓLICA
El periódico católico es el soldado desconocido que defiende las posiciones de la cristiandad y por eso es digno de todo nuestro apoyo. ¿Que conseguiremos con construir iglesias, levantar colegios, fundar hospitales si un día los artículos incendiarios de la prensa ponen fuego a nuestras obras? ¿Como defender la iglesia? –Con una gran muralla de papel.
Nuestra prensa infantil católica alcanza poca difusión porque no tiene el apoyo de la familia, ni de la escuela, ni de la parroquia. Los escasos ingresos no les permiten a estas Editoriales ni hacer propaganda, ni mejorar la revista, ni enviarla a los kioskos para su venta callejera. El mejor apoyo es la suscripción directa que debe figurar en el presupuesto familiar católico.
“A todo niño católico, una revista católica.”
Pero los Tebeos católicos no pueden ser la continuación de una clase de religión, basta con que se entretengan al muchacho sin perjuicio de su educación, animándole al estudio y depositando en su corazón nobles inquietudes que le eleven a los mas altos ideales.
En casi todas las naciones hay revistas infantiles y educativas, editadas con criterio católico, como “El Vittorioso” en Italia, “Coeur Vaillant” en Francia; en Holanda tienen revistas católicas formativas muy difundidas que leen mas de medio millón de niños.
REMEDIOS
1) Hablar a los niños sobre la importancia y selección de las lecturas, darles conferencias con proyecciones para que rechacen la basura literaria y comercial.
2) Vigilancia cuidadosa de los padres y educadores sobre las lecturas de los niños, dándoles instrucciones sobre lecturas nocivas y provechosas.
3) Escribir cartas a los directores de la prensa infantil haciéndoles ver el daño que causan con sus publicaciones deseducativas y rogándoles que publiquen material bonito y educativo. Colaborar en las revistas de mayor difusión con el envío de historias educativas.
4) Obtener de las autoridades leyes que proscriban la mala prensa, conocerlas y hacer que se cumplan en todas partes.
5) Preguntar el confesor a los niños sobre sus lecturas para que hagan una selección conforme a la moral; lo mismo a los padres para que vigilen en este punto a los hijos.
6) Establecer centros de difusión de la buena prensa infantil que contrarresten a la mala o indiferente. Organizar la venta y cambio de revistas infantiles educativas en los puntos de mayor concurrencia de los niños, atraerlos con medios insinuantes y formarles directamente la conciencia y el gusto literario.
7) Fomentar la suscripción directa. Cada parroquia, catequesis, escuela y colegio debe recibir paquetes (5 ejemplares) para sus niños suscriptores y aun para la venta apostólica; reservando los que sobren para premios en catequesis de aldeas.
8) Sustitución. No basta prohibir a los niños las malas lecturas, porque tienen una gran curiosidad por conocer el mundo; quieren explorar, avanzar, son mareas incansables, imposible convertirlos en lago de aguas tranquilas. El niño leerá y esas lecturas le harán una gran impresión, porque se entrega al autor en cuerpo y alma, todo lo acepta, aunque sea veneno, porque es incapaz de apreciar el mal. No queda mas remedio que sustituir el mal TEBEO por otros educativos. El hombre, sin darse cuenta, imitará a los héroes que le apasionaron en su niñez y juventud.
LOS NIÑOS LEEN LO QUE QUIEREN SUS PADRES
REVISTAS FORMATIVAS
“Aguiluchos”, mensual, misional; 8 a 14 años, bien presentada. suscripción: 60 Ptas.; numero suelto, 7 Ptas. PP. Combonianos, Apartado 361, Ategorrieta, San Sebastian (Guipúzcoa)
“Anales de la Santa Infancia”, misional; seis números al año 15 Ptas. la suscripción; C/ Manuel Iradier, 12-1º. Apartado 35, Vitoria.
“Hosanna”, 8 a 14 años. Revista de la Cruzada Eucarística, mensual, piadosa y formativa. suscripción: 60 Ptas.; Apartado 73, Bilbao (Vizcaya)
“Juventud Misionera”, mensual, tira 16.000 ejemplares, 60 Ptas., al año; Y “En marcha” revista juvenil. PP. Salesianos. C/ Alcalá, 164, Madrid-2.
“Ling-Ling”,mensual, misional. 8 a 14 años. suscripción: 50 Ptas.; PP. Franciscanos, calle Calaf, 13, Barcelona.
“Juventud Siglo XX”, (J. 20), 10 a 16 años. 15 números al año. suscripción: 135 Ptas.; numero suelto, 10 Ptas. En PP. Salesianos. Paseo San Juan Bosco, 62, Barcelona.
“Primavera”, Revista juvenil femenina, 12 Ptas. ejemplar. Vía Laura Vicuña, 1.- 20092 Cinirello. Balsamo (Milán).
“Héroes Bíblicos”, Las grandes aventuras de la Historia y otras colecciones. Anuncian para el futuro otras publicaciones: “Cuadernos de jóvenes” y “Poder joven”, en PP. Salesianos. Paseo San Juan Bosco, 62, Barcelona.
“Molinete”, para niños y niñas de 8 a 12 años. Editorial Dulma. Calle General Mola, 90, 5º.- Madrid (17)
“Historias ilustradas de la Biblia”, Interprint, Medellín. Colombia. Se venden en kioskos.
“Vidas ejemplares”, de 10 a 20 años. Trae 32 paginas en colores de tipo TBO; son vidas de Santos y personajes ilustres. Buena Prensa. Apartado 6.999, México. Distribuidor para España: Editorial Novaro: Plaza Cardona, 5-6, Barcelona (6). Tiene otras colecciones “Patronos y Santuarios”, “Historia del Cristianismo”, etc.
A. Zulueta, (S.J.)
¿Qué leen los niños?
Col. Folletos ID.
Santander; Editorial Sal Terrae; (1963)